Esta vez hablaremos de unos de los temas que más me divierten. La fotografía para alimentos. Hace menos de dos semanas hemos hecho la sesión de fotos de la nueva carta temporada otoño/invierno para un restaurante italiano en Poblenou llamado L’Aldilà. Haciendo las fotos en el mismo restaurante, Luca, Loris, y yo comentábamos cómo deberían presentarse los platos para que tengan el aspecto más apetecible posible.

Esto me dió pie a compartir los siguientes consejos para fotografiar platos de comida.

Desde mi cuenta de instagram puedes ver varios ejemplos de fotografías de alimentos.

Céntrate en el protagonista

El plato que vas a fotografiar debe ser lo que llame la atención de la imagen. Es el protagonista. La imagen está hecha con un fin muy sencillo. Despertar las ganas de comerlo, incentivar el apetito. Por ello hay que escenificar o ambientar el plato. El fondo es esencial.

Uno de los recursos más sencillos que solemos utilizar es presentar el plato en un fondo neutro de color negro que permita contrastar con el alimento, por ejemplo: imaginemos que queremos fotografiar unas patatas bravas. Para hacer que se vean lo mejor posible, vamos a buscar un recipient elegante, sencillo y sin adornos que eviten distracciones. También utilizamos un fondo de color negro para que nada nos haga desplazar la mirada de la patata recién hecha. Para este fondo utilizaremos un mantel negro mate. Con este tipo de composición lograremos que el usuario tenga la atención absoluta en la patata y la salsa.

Ten en cuenta que el protagonista, en este caso, es la patata recién hecha y la salsa que lo cubre, no el plato, no el fondo.

Concordancia y coherencia

Es vital que el plato parezca lo que se supone que és. Es decir, la composición del plato debe ser de tal manera que se entienda lo mejor posible de que se trata. Si hacemos un plato de “pollo con salsa con arroz”, el pollo no puede estar escondido entre la salsa y el arroz. Si se trata de “carne a la parrilla”, se debe entender que la carne debe estar marcada por las típicas líneas del metal ardiente de la parrilla, si fuera el caso de una hamburguesa con queso, bacon, lechuga y cebolla no puede faltar ninguno de estos ingredientes en la imagen.

Se deben ver claramente diferenciados. Si el plato es de pasta con salsa, en la imagen se debe bien claro el tipo de pasta y la salsa debe cubrir la pasta de manera parcial para que se entiendan bien los dos elementos. Al igual que las patatas bravas. De hecho, si logramos que en la salsa se entiendan los ingredientes, mejor. Imagina que es salsa pesto. Pues estaría genial que se pudieran ver los piñones y la albahaca.

En este caso os pondremos un ejemplo de pulpo a la gallega:

La mejor presentación posible

Hay que cuidar los detalles al máximo. Con esto me refiero a la limpieza de la presentación. Los detalles aparecen en la pantalla y se ven grandes. Hay que evitar las huellas de dedos, las marcas o arrugas del mantel, evitar el polvo, pelos o migas de pan. Todos estos detalles hay que percatarse antes de hacer la foto, porque luego en la postproducción habrá que corregirlo y mientras menos se deba corregir menos tiempo invertirán.

Es importante preparar bien el set y trabajar con cuidado mientras se hacen las fotos.

Amplifiquemos el detalle

Dentro de estos consejos para fotografiar platos de comida éste es uno de los recursos que más solemos utilizar y que el cliente siempre nos pide. Fotografía primeros planos bien claros y enfocados. Todo plato tiene un punto diferencial que permite potenciar y hacerlo más interesante. El elemento que más interesa es el que debe estar enfocado y a medida que nos alejamos del punto focal debe irse difuminando progresivamente.

Por lo normal, el primer plano debería estar en el centro de la imagen y más cercano al objetivo de la cámara.

Hágase la luz

Puedes tener la mejor cámara del mundo, pero si no cuentas con adecuada iluminación (sea natural o propia) no podrás hacer nada. Disponer de un buen equipo de luz permite controlar la situación e iluminar a tu antojo. Podemos incluso resaltar las texturas de la comida generando sombras con una buena luz lateral. O darle un toque más dramático al alimento para aumentar la relevancia jugando con luz trasera o cenital.

Evitar las prisas

Uno de los obstáculos más comunes en la fotografía de alimentos es el tiempo. Es importante poder trabajar con tranquilidad para obtener el mejor resultado. Seguro que te suena la botella de cerveza recién sacada del congelador...  el humo de la pizza recién hecha, el color de la carne recién sacada de la parrilla, mantener el volumen del sirope de chocolate justo encima del helado de nata antes que empiece a derretirse, la lechuga tan fresca que aún conserva micro gotas de agua...  

Para ello se emplean trucos que te permiten ganar tiempo e incluso potenciar atributos como el aspecto congelado de una bebida refrescante. Dentro de estos consejos para fotografiar platos de comida te ofrecemos un truco sencillo.

¿Cómo lograr el efecto del frescor en una botella?

Con la botella totalmente seca y a temperatura del tiempo, mójala suavemente con un trapo untado de aceite y luego rociarlo con un pulverizador cargado con agua y glicerina. Notarás como se marcan las gotas y se mantienen.

Para hacerlo de manera más profesional en este artículo te explican como hacer el efecto cerveza helada.

He encontrado un canal de fotografía para alimentos que nos parece interesante: Food Photography Masterclass by Jamie Oliver.

Mantener la naturalidad

Toda imagen de fotografía para alimentos profesional tiene un proceso de postproducción. En este proceso corregimos los colores, el encuadre, los balances de blanco, el contraste, resaltamos el punto focal. Incluso, a pesar de manipular con cuidado y trabajar con un set bien preparado, hay muchos detalles que solo aparecen cuando está en la pantalla de nuestro monitor. Como una mota de polvo, una gota que está donde no debería estar, una arruga del mantel que molesta, una hora doblada, etc.

Lo más importante es que el plato o alimento parezca lo más real y natural posible. Al fin y al cabo, el plato ya debería parecer bueno y suculento antes de hacer la fotografía no después.
Esperemos que estos consejos para fotografiar platos de comida sirvan sobre todo para concientizar y hacer caer en cuenta del trabajo real que hay detrás de cada foto y, al mismo tiempo, lo relevante que es para un negocio contar con imágenes que realmente le saquen el máximo partido al producto para lograr su objetivo. Venderlo.